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viernes, 15 de junio de 2012

EL MASAJE ENERGÉTICO. CONCEPTO DE ENERGÍA VITAL. (QUINTA PARTE Y ULTIMA)


 por lo tanto a mejor respiración más gruesa será esta capa y más protegido quedará el cuerpo....."


Y por qué hablo del estrés emocional? Pues porque precisamente van a ser las consecuencias de este tipo de estrés las patologías más comunes que vamos tratar con el masaje energético.


En efecto, a lo largo de años de trabajo he podido comprobar como el estrés emocional va ocasionando alteraciones que se manifiestan en el plano físico.


El caso más frecuente es el de las dorsalgias provocadas por bloqueos emocionales o conflictos sentimentales mal resueltos. Aunque también podemos encontrar lumbalgias a causa de sentimientos de inferioridad o miedos, o faringitis ocasionadas por las dificultades en la expresión y verbalización de los sentimientos.


En el masaje energético que he desarrollado, se unen técnicas diferentes.
Podemos encontrar técnicas del masaje californiano, masaje sensitivo, digitopuntura o reiki, porque cada una de ellas nos va a permitir actuar sobre la circulación energética de la persona.


Para poder realizar este tipo de masaje es necesario conocer una serie de conceptos, en primer lugar es imprescindible conocer el sentido de la circulación del chi.


La pila generadora se encuentra en el llamado ming men, un punto que se encuentra sobre el eje de la columna vertebral entre la 2ª y 3ª vértebra lumbar y estrechamente relacionado con los riñones.


A este punto también se le conoce como hara, y para más información os diré que también coincide con el centro de gravedad del cuerpo.


Desde éste punto, la energía desciende hasta el punto hui yin, en el perineo y asciende por la linea central del cuerpo, por su parte anterior a través del meridiano Ren Mai, llegando hasta la coronilla desde allí la energía comienza a descender por la espalda por el meridiano Du Mai hasta llegar de nuevo al perineo o punto hui ying, completando así uno de los circuitos más importantes de la energía corporal.


Precisamente sobre el trayecto superficial de estos meridianos es donde aplicamos nuestras manos para actuar sobre los chakras.


La energía también recorre las extremidades de la siguiente manera:


En las extremidades superiores, la energía asciende por la cara externa y desciende por la cara interna. El tipo de energía que circula por la cara externa es yang mientras que la que recorre la cara interna es ying.


En las extremidades inferiores, la energía asciende por la cara interna ying, y desciende por la cara posterolateral que es yang.


Por lo tanto el objetivo del masaje energético será buscar y diluir los posibles bloqueos en la circulación energética y activarla.


Pero el masaje energético no es una mera sucesión de pasos mecánicos, es un proceso de interacción con la otra persona, que va a hacer que nosotros también nos veamos beneficiados. De echo si después de una sesión de masaje energético no encontramos cansados o incómodos es que algo no hemos hecho bien.


Tras una sesión debemos encontrarnos relajados y pletóricos, tanto como nuestro paciente.


Es más, el masaje energético es un proceso de aprendizaje, es una técnica que va mejorando y creciendo a la par que nosotros evolucionamos y crecemos.


Con el tiempo y la práctica podemos llegar a ser canalizadores de la energía exterior y transmitirla al paciente a través de nuestras manos, potenciando, y de qué manera, los efectos de esta técnica.




NAMASTÉ.

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